¿Tienes que trabajar durante muchas horas y rendir al máximo? El espacio de trabajo ejerce una gran influencia en nuestra productividad, ya que nos ayuda a estar más centrados, más cómodos y nos ameniza el tiempo que pasemos frente a la pantalla.
A veces tenemos que trabajar desde casa y acondicionar un espacio para ello. Incluso aunque este sitio no vaya a ser de uso exclusivo para nuestras jornadas laborales, hay que tener en cuenta algunos tips para organizar esta especie de despacho en casa para dejar atrás los malos hábitos (por muy tentadores que estos sean).
Olvídate de trabajar desde la cama o desde el sofá, de ir a la nevera cada dos por tres o pasar por alto las comodidades que en una oficina siempre disfrutamos. Lo mismo se aplica si en vez de trabajar tienes que estudiar regularmente. ¡Toma nota!
Consejos para organizar el espacio de trabajo y mejorar la productividad
Lo ideal es que el espacio de trabajo o de estudio sea de uso exclusivo para tal fin. Sin embargo, es cierto que a veces tenemos que compartirlo con otras personas o destinarlo para otra utilidad de forma ocasional. Así que, cada vez que te toque trabajar tendrás que volver a analizar estos tips.
Prepárate tú mismo
Para empezar, si vas a teletrabajar, usa una ropa que también utilizarías para ir a trabajar. Si te quedas en pijama tendrás mayor tentación de caer en la holgazanería o bajará paulatinamente tu autoestima. Para comenzar cada día con buen pie hay que proponérselo en todos los aspectos.
Define una zona de trabajo
Puedes poner un escritorio con su respectiva silla y ordenador en cualquier rincón de casa, pero es importante elegir un lugar tranquilo, libre de olores y que no obstaculice el paso.
¿Dónde?
En el salón, en el comedor, el dormitorio o una habitación especialmente acondicionada para ello. Lo importante es que el lugar te permita desarrollar tu trabajo con comodidad y libre de distracciones.
Usa una silla de oficina cómoda
Hay sillas de escritorio que se adaptan a rincones pequeños, pero, sobre todo, piensa en la comodidad. Esta pieza de mobiliario de oficina es fundamental para maximizar el rendimiento, puesto que cuando estamos cómodos y nos sentimos bien es cuando podemos concentrarnos mejor en el trabajo y ser más productivos.
Emplea artículos que ayuden a mantener una postura ergonómica
Para mantener la espalda recta y en una postura adecuada por más tiempo te recomendamos hacerte con:
- Un reposapiés
- Un elevador para el ordenador, que deberá estar a la altura de los ojos
- Un par de cojines
Organiza tu espacio de trabajo con archivadores y cajones
Tienes a tú disposición una gran variedad de organizadores y archivadores. Incluso en casa puedes reciclar algunos objetos que te sirvan de recipiente para guardar algunas cosas. Como ideas te sugerimos:
- Decorar cajas de zapatos y ponerles separadores en su interior (con las mismas tapas)
- Reutilizar el recipiente de plástico y redondeado de los bastoncillos de oídos
- Emplear pastilleros para contener los artículos más pequeños: las tarjetas de la cámara, los clips, USB, etc.
- Usar una bandeja de entrada que puedas tener cerca para organizar todos los papeles y documentos que necesitas del trabajo
Archiva tus objetos del espacio de trabajo por categorías
Es importante tener un sistema de archivo por categorías para tener todas las pertenencias y documentos bien organizados. Para ello, tan importante son los archivadores como las etiquetas. De este modo podrás localizar rápidamente lo que necesites.
Mantén el orden
Un espacio desordenado incita al caos, que es justo lo que debes evitar a toda costa.
El escritorio tiene que estar despejado y prácticamente vacío, sobre todo si es un escritorio pequeño para ahorrar espacio. Piensa en todo lo que usas todos los días y qué necesitas si o sí tener a mano. Por ejemplo, una agenda, una libreta, un lapicero y esperemos que nada más.
Aporta un toque personal
Con un par de detalles decorativos podrás despertar la creatividad y, además, nos servirá para sentirnos más animados a la hora de ponernos a trabajar. Estos detalles pueden ser un par de mini plantitas (por ejemplo, algunos cactus sin pinchos), un par de láminas decorativas, una alfombra mullidita… Todo ello dependerá de tus propios gustos.
Alíate del blanco
Si eliges el mobiliario de oficina de color blanco o dejas el color de la pared de este color te aportará una sensación de tranquilidad, frescura y limpieza. Todo lo que pueda transmitirte el blanco te ayudará a mantenerte concentrado en tu lugar de trabajo.
Cuál es la iluminación más adecuada para trabajar
Si podemos estar en el espacio de trabajo con luz natural es mucho mejor. No obstante, lo habitual es que sea necesario apoyarnos en la luz artificial.
Procura que la luz no te dé de forma directa y no refleje en tu pantalla. Lo más recomendable es que la luz venga de frente o en perpendicular, pero no de espaldas.
Es preferible emplear una iluminación homogénea, que sea difusa y que sirva para alumbrar de forma general toda la habitación que poner una lámpara de mesa y te perjudique visualmente. No obstante, si la luz general es insuficiente, deberás emplear una lámpara de pie, que esté por encima de la cabeza e ilumine claramente la zona de trabajo.
Una iluminación ineficiente o que sea demasiado bajo incrementa la tensión en los ojos y perjudica al nivel de productividad.
Recuerda que la iluminación más favorable para incrementar la productividad es la luz blanca.
¡Eso es todo!
Ahora que ya tienes todo tu espacio de trabajo bien organizado y en condiciones, ¡es hora de currar!
¡Muy interesante y aplicable en muchos ámbitos! Al fin y al cabo es lo que decís, la atmósfera que tenga el lugar de trabajo o el espacio en el que te encuentres, te ayudará a potenciar el sentimiento de pertenencia al proyecto de cada empleado, el trabajo colaborativo, su creatividad, un buen diseño y muy importante con zonas diferenciales, que faciliten la desconexión y, por tanto, su motivación…
¡Gracias por compartir!