¿Estás planteando instalar puertas correderas en casa? Esta opción es una buena solución para dividir ambientes y aprovechar todo lo posible el espacio. Debes tener en cuenta que hoy en día existen puertas correderas de todo tipo, de diferentes tamaños, que estén encastradas…
Consejos para elegir las puertas correderas
¿Quieres una puerta corredera para casa? Cuando queremos dar al ambiente un aspecto más diáfano y ganar sensación de amplitud, la instalación de puertas correderas es una posibilidad muy atractiva. Si bien es cierto que para un dormitorio no es lo más idóneo al limitar la privacidad por su facilidad de apertura, las puertas correderas son muy demandadas en los espacios que delimitan salón comedor y cocina, para diferenciar los despachos o dividir entre dormitorio y vestidor. Incluso en baños privados que tenemos para unos dormitorios en concreto, como en el caso de los dormitorios de matrimonio, es común encontrar puertas correderas.
Ten en cuenta nuestras recomendaciones para elegir las puertas correderas:
El sistema de funcionamiento de las puertas
Antes de decidir nada, infórmate sobre las diferentes posibilidades de las puertas correderas, ya que es posible que ignores alguno de los sistemas y pienses que en tu casa no podrías ponerlas. Tal vez estés en un error.
Puertas encastradas o empotrada
Una de las puertas correderas con más ventajas en las casas pequeñas es la que va empotrada en el interior del tabique. Así que cuando abrimos la puerta corredera en su totalidad esta queda oculta en el interior de la pared. La instalación requiere hacer obra y tener la certeza de que los muros sobre los que va a ir la puerta no son de carga. En realidad, la obra no es tan compleja como parece, pues se suele poner una placa de escayola para poner un doble tabique, pero todo ello encarece el proyecto.
Semi encastradas
Si la pared sobre la que queremos encastrar la puerta corredera no es muy profunda, una de las opciones es ponerla semi encastrada. Esto quiere decir que una parte de la puerta corredera quedará oculta en el tabique mientras que la otra parte será visible, pudiendo ser abatible o giratoria. ¿Conocías antes este tipo de funcionamiento?
Puertas correderas solapadas
Las puertas solapadas son aquellas que tienen las guías de los railes al descubierto. Son más económicas y suelen ser el tipo de puertas que todos tenemos en mente cuando pensamos en las correderas. Estas se deslizan sobre un rail instalado a lo largo de la pared, de manera que, cuando la puerta está abierta, uno de los lados de la pared queda cubierta. Por tanto, el gran inconveniente de este tipo de puertas correderas es que debes dejar la pared totalmente despegada a ambos lados de las puertas: ni muebles, ni cuadros, ni espejos…y cuidado con los interruptores.
Puertas plegables
Este tipo de puertas eran muy comunes antiguamente cuando hablábamos de puertas correderas. Sin embargo, también las puedes tener en cuenta si este tipo de sistema se adapta mejor a tus necesidades. Por ejemplo, si el espacio del que dispones es muy limitado y no quieres poner puertas batientes, las puertas plegables pueden ser para ti. No tendrás ningún problema a la hora de instalarlas y, una vez realizado este proceso, podrás recoger las puertas a un lado u otro.
El tipo de material de la puerta corredera
¿Cómo quieres que sea la composición de las puertas? El material influye determinantemente en su aspecto, lo que hace que estas puedan ser muy decorativas.
Puedes elegir entre:
- Puertas correderas de cristal, perfectas para dejar pasar la luz y hacer la habitación más clara. Si, por ejemplo, vas a delimitar el espacio del comedor y pones una mesa de cristal, conseguirás una decoración muy elegante.
- De MDF o aglomerado, imitan otros acabados. Sin dejar de ser consistentes, son más económicas.
- De madera maciza, que proporcionan un buen aislamiento térmico y acústico. Combinarán a la perfección con los muebles de madera.
- Puertas correderas de aluminio: Son muy resistentes y decorativas, ya que hay muchos diseños, pero más caras.
En este sentido, hay que tener en cuenta que si instaladas puertas correderas de un material muy pesado, debes poner un raíl consistente que soporte más de 30 kg, ya que este solo se fija a la pared o al techo.
Las dimensiones
¿De cuánto puede ser una puerta corredera?
Existen diferentes medidas. Si lo que te preocupa es el espacio del que dispones, puedes poner las de una sola hoja, que suelen tener una dimensión de entre 60 y 120 cm. Sin embargo, las de dos hojas miden el doble, pudiendo ser entre los 120 y 270 cm.
De todas formas, si cuando vayas a elegir las puertas correderas no te encajan sus dimensiones también la puedes hacer a medida.
¿Ya has considerado todos los requisitos para tu elección? ¡Esperamos que sí!