La llegada del otoño suele venir aparejada de muchos cambios. Y no es para menos; un día estamos en ropa de verano y otro día, sin que te des cuenta, acabas buscando refugio bajo una manta. ¿Has preparado tu casa para el otoño? Adapta la decoración de tu hogar a todo lo que requiere el otoño para estar preparado a tanto cambio.
Por qué decorar la casa en otoño
Cuando finaliza el verano hay un periodo de tiempo en el que aún no notamos la bajada de temperatura o el cambio de estación, pero todo eso está en transición. Así que hay que andarse preparados y cambiar el ambiente del hogar para dar una cálida bienvenida al otoño.
La decoración en otoño tiene un encanto especial, ¿quieres saber cuáles son los trucos?
Acoge esos días de lluvia intermitente, esas tardes noches de sofá y libro para las que necesitas una mantita y di sí a las infusiones que te ayudan a entrar en calor.
Decoración en otoño: Tips para preparar la casa
Para tener todo a mano y poder disfrutar del otoño en todo su esplendor te recomendamos acondicionar la casa en clave decorativa.
Estas son algunas ideas de todo lo que puedes hacer para una decoración otoñal:
- Empieza por preparar las zapatillas de casa: ¿En qué momento abandonar las chanclas de andar por casa por las zapatillas de invierno? Ese momento es clave para saber que ha llegado el momento de preparar la decoración de otoño. Unos pequeños gestos que ayudarán a que esta época te resulte más agradable.
- Renueva los colores de la decoración de casa: Para dar un pequeño cambio en este sentido no es necesario invertir una suma considerable de dinero. A veces basta con añadir un par de velas decorativas, cambiar las fundas de los cojines y hacerte con un nuevo plaid, por ejemplo. Los amarillos, ocres, naranjas son muy típicos del otoño, pero también los tonos tierra, que pueden combinar, por ejemplo, con el color terracota.
- Añade una alfombra: En la parte de la casa donde pases más tiempo es más que recomendable incorporar una alfombra, sobre todo si tu suelo no es de madera. De este modo contarás con un recurso muy socorrido a la hora de mejorar el aislamiento térmico de tu casa.
- Reflejar la naturaleza. Un consejo decorativo es que tu hogar siempre esté en sintonía con lo que está viviendo la naturaleza en ese momento. Una combinación que, además, es muy propia de la decoración nórdica que tanto está de moda. Para ello, seca unas piñas para optimizar su conservación, prepara un ramillete de espigas o ramas secas o, incluso, hazte con una calabaza. Las calabazas son un icono de Halloween, pero también representan a la perfección lo que es el otoño.
- Crea una atmósfera otoñal mediante el olor. Una manera sensacional de que el otoño entre en casa es brindar un aroma que nos recuerde a este momento del año. Hay muchos aromas que podemos poner en un incienso o a través de velas aromáticas: naranja, chocolate, césped mojado, pino, bosque, extracto de vainilla…
- Hora de arroparse: Prepara mantas o plaids que puedas tener a mano en el sofá o a los pies de la cama, pues podrán ser necesarias cuando estemos en nuestros momentos de relax.
- Purgar los radiadores o preparar la chimenea. Si tienes equipo de calefacción en casa el otoño no solo implica un cambio en la decoración, sino que también hay que acondicionar. Prepara los radiadores para que en el momento en que tengas que poner la calefacción todo funcione de la manera más eficiente posible.
- Mejorar la iluminación. Por supuesto, una decoración en otoño debe tener una iluminación cálida. Recuerda que anochecerá cada vez más temprano, así que cuenta con un par de apliques extra en cada rincón o hazte con unas velas que aporten ese clima otoñal tan acogedor.
- Marca la diferencia con algo DIY. Si añades una decoración que puedas hacer por ti mismo cumplirás con una personalización del espacio al 100%. Por ejemplo, puedes preparar una manualidad con piñas de pino para realizar un centro de mesa o algo similar.
¿Has anotado todo?
Cuando transmites el cambio de estación en la decoración de tu hogar el tránsito se hace mucho más sencillo. Verás que así hay una excusa más para sentir la emoción del momento.