El mueble aparador tiene numerosos usos y hoy en día andamos un tanto perdidos respecto a dónde debe ir ubicado, qué se pone en su interior, cómo debe ser el aparador en sí… ¡Calma!
El mueble aparador es una pieza de mobiliario versátil y muy funcional que hoy en día ha pasado a ocupar un lugar importante en la decoración de interiores. Aunque tradicionalmente lo hemos asociado siempre al comedor, a día de hoy su uso se llega aplicar a diferentes partes de la casa, puesto que es una pieza que aporta estilo, funcionalidad y equilibrio.
Es cierto que, en el mundo de los muebles, hay veces que la terminología puede ser confusa. Al decorar el salón con muebles comedor, es común encontrar conceptos que no terminemos de entender. Sin embargo, más allá de las ideas preconcebidas o nuestros propios prejuicios, es fundamental elegir el mueble aparador más adecuado según las necesidades específicas de cada espacio.
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¿Qué es un mueble aparador y para qué sirve?
Los aparadores son muebles de almacenaje que se emplean tradicionalmente para guardar los utensilios y los accesorios que son necesarios en el comedor. Este mueble aparador está compuesto por un par de puertas y/o cajones, siendo de estatura más bien baja y con un diseño alargado.
Este mueble, que puede encontrarse en una gran variedad de materiales, diseños y colores, se adapta fácilmente a diferentes estilos de decoración interior. Los más demandados son los de estilo nórdico o estilo industrial, pero también hay algunos estilos que son más clásicos, unos más rústicos, etc. Los diseños varían también en función de cómo irán montados, permitiendo opciones que se fijan a la pared o que descansan sobre patas, dejando que el aparador vaya directamente apoyado en el suelo. Es cuestión de gustos.
Materiales y estilos de un mueble aparador
Un aparador para el comedor puede fabricarse en una amplia gama de materiales, desde maderas macizas, con acabados de diferentes tonos, como el roble o el nogal, hasta opciones más económicas, como el MDF. Asimismo, también hay aparadores que se fabrican con acabados en metal o en vidrio para que estos adquieran un toque más moderno e industrial.
El hecho de que un mueble aparador sea de un material u otro es algo que afecta no solo a la estética, sino también a la durabilidad y al mantenimiento del mueble.
- Aparadores de madera maciza: Los amantes de lo natural y del tacto de la madera buscan un estilo rústico o clásico que encontrarán en los aparadores de madera maciza. Perfectos para ser más duraderos, aunque requieren un mantenimiento más delicado.
- MDF o melamina: Son los materiales más asequibles, por lo que lo más habitual es que encuentres aparadores con estas etiquetas porque tienen un coste más bajo y pueden ajustarse a todos los bolsillos. Además, permiten una mayor variedad de acabados, dando mayor libertad al diseño de los muebles. Ideales para decoraciones modernas y minimalistas.
- Metal y vidrio: Algunos aparadores están hechos con estructuras de metal y detalles en vidrio para obtener un look más contemporáneo y/o industrial. Ofrecen un aire ligero y sofisticado, pero son poco habituales.
Funciones principales de un mueble aparador
El aparador dispone de varias funciones, pero la principal es la de almacenar y garantizar el orden en casa. Dado que hoy en día las viviendas son reducidas y vamos amoldando el hogar a las necesidades más variopintas, el mueble aparador se usa más allá del comedor.
Estas son algunas de las funciones que podemos enumerar para el mueble aparador:
- Para guardar la vajilla y cubertería: Este es el uso tradicional del aparador, lo cual favorece el orden y la organización a la hora de servir la mesa del comedor.
- Para dejar en él los utensilios de cocina: Si el aparador se encuentra en un área próxima a la cocina, puede ser útil guardar utensilios que se usan con frecuencia.
- Para guardar las servilletas y el mantel: Son elementos esenciales para vestir la mesa y tienden a ocupar determinado espacio, por lo que pueden encontrar su lugar en el aparador.
- Para otros usos: Su versatilidad también permite guardar libros, documentos de oficina o, incluso, los juguetes y consolas de los hijos
Al fin y al cabo, en una casa las reglas las ponen sus habitantes.
Dónde colocamos un aparador: ¿Comedor o salón?
Tradicionalmente el aparador es un mueble que se suele ubicar en la zona del comedor, es decir, junto a la mesa y las sillas de comedor, permitiendo un acceso rápido a los elementos que favorecen el servicio de la mesa. Sin embargo, hoy en día podemos colocar un aparador en otras estancias.
Si dejamos atrás lo tradicional podemos ponerlo en cualquier lugar del salón o en el rincón en el que veamos que más encaja con su utilidad y con la decoración del hogar. Esto es, en el recibidor o en zonas de paso en las que consideremos convenientes y en las que pueda ejercer un rol de transición entre el salón y recibidor, por ejemplo.
¡Es muy versátil y decorativo!
- En el salón: Un aparador en el salón, cerca del mueble tv o de otro mueble auxiliar será ideal para ser empleado como mueble con capacidad de almacenamiento y para exhibir objetos decorativos (fotografías, libros, jarrones, cuadros, etc.). Además, en algunos casos incluso podrá ejercer de separador de espacio o como punto de cohesión que ayude a la coherencia visual de la decoración.
- En el recibidor: Si la entrada de tu casa es lo suficientemente grande y precisas de un mueble para guardar tus objetos y, además, decorar esta estancia, un aparador puede ser buena elección. Lograrás aportar un toque de estilo a esta parte de la casa, favoreciendo las buenas impresiones de tu casa para quienes la visiten.
- Zonas de paso: Hay muebles polifacéticos y es el caso de los aparadores. Así que podrás ubicarlos en corredores amplios o zonas de paso para mantener el orden sin sacrificar el estilo. Servirá como espacio de almacenamiento extra.
Por qué se utiliza un aparador en el comedor
De cualquier modo, no hay duda de que lo más práctico es emplear un aparador para el comedor, ya que es un mueble espacioso en el que podemos almacenar todo lo indispensable para servir la mesa. Así ha sido tradicionalmente y así es como se sigue empleando en la actualidad a pesar de sus diferentes funciones o ubicaciones.
Si piensas que puedes pecar de anticuado/a por poner un aparador relativamente cerca de la mesa del comedor, nada más lejos de la realidad. Ahora muchos de los muebles para el salón incluyen una pieza de aparador a juego. ¿Por qué? Pues una de las razones es que como contamos con poco espacio, muchos interioristas optan por combinar el mueble de la tv con el aparador y ¡poco más! Sin embargo, hace unos años era más común incluir una vitrina o librería, una estantería de tamaño considerable o algún otro módulo. Ahora, lo que se lleva es optar por el minimalismo y amueblar el hogar solo con lo mínimo imprescindible para crear una estética armoniosa en el hogar.
Diferencias entre aparador y consola
Por otra parte, como el mueble aparador no lo vemos exclusivamente en la zona del comedor, hay mucha confusión al respecto. Una de ellas es entre el aparador y la consola. ¿En qué se diferencian ambos muebles?
Mientras que los aparadores son más voluminosos y están destinados principalmente para el almacenamiento, los muebles consolas son un tipo de mueble auxiliar que, generalmente, es más pequeño y suele emplearse con finalidades más decorativas.
De modo que:
- El aparador: Es un mueble destinado al almacenamiento de objetos de mayor tamaño y de uso frecuente, con una apariencia más robusta, y que es más habitual ver en zonas de la casa como el salón comedor.
- La consola: Es un mueble considerablemente más pequeño, con una función más complementaria y decorativa. Es más común emplear esta pieza como soporte para lámparas, pequeños jarrones o el teléfono, en espacios como el recibidor o el pasillo.
Aparador, consola y vitrina: diferencias
La ecuación se complica aún más si hablamos de las diferencias entre aparadores, consolas y vitrinas. Son muebles que podemos encontrar en el salón comedor; de ahí su confusión, pero los tres conceptos son muy diferentes.
Como hemos visto en el apartado anterior, la consola se emplea sobre todo como mueble auxiliar. Lo que ocurre es que algunos diseños de aparadores son de un tamaño más reducido a lo habitual y, por ello, se asemeja al aspecto de la consola. Pero hay que saber diferenciarlos. La consola simplemente nos sirve para colocar sobre ella algunos objetos: una pequeña bandeja decorativa, un jarrón de flores, un marco de fotos…
Por su parte, la vitrina es otro de los muebles que se emplea para almacenar la vajilla. La diferencia respecto al mueble aparador es que en este anterior se guarda la vajilla más valiosa a modo de exposición. Las vitrinas son muebles acristalados con distintos estantes, por lo que tiene una función más exhibicionista. En los aparadores podemos guardar los objetos de manera apilada, ya que no se verán (a no ser que haya huecos sin puertas y sin cristal). En las vitrinas, en cambio, lo que guardamos en su interior lo hacemos desde un enfoque decorativo.
El mejor mueble para guardar la vajilla
Si lo que necesitas es un mueble donde guardar la vajilla, el aparador es una excelente opción, pero no la única. Además de las vitrinas, las alacenas también cumplen esta función.
- Alacena: Este mueble es generalmente más grande que el aparador y de aspecto más clásico. Se ubica en la cocina, que es donde combina con el resto de mobiliario. Es un mueble ideal para quienes prefieren mantener la vajilla cerca del área donde se prepara la comida, ya sea de forma expuesta o no.
En conclusión, el mueble aparador es una pieza esencial en la decoración del hogar, tanto por su estilo y versatilidad como por su capacidad de almacenamiento para contener vajilla y muchos otros objetos. Un mueble que se adaptará a tus necesidades ya sea en el salón o en cualquier otra parte de la casa, convirtiéndose en un gran aliado para mantener el orden y la decoración.